¿Cuántas horas hay que dormir como mínimo?
Seguramente, a la pregunta ¿cuántas horas hay que dormir cómo mínimo? nos responderías: ¡8! Puede que no te equivoques, pero debes saber que las horas de sueño recomendadas varían en función de diferentes factores y no siempre ocho horas es la respuesta correcta. ¿Quieres saber por qué? En VitalCama te lo desvelamos.
¿Es tan importante dormir bien?
¡Es fundamental! Mientras dormimos, nuestro cuerpo y mente se regeneran y se preparan para enfrentar un nuevo día. Un sueño de calidad nos permite mejorar nuestra memoria y concentración, regular nuestras emociones y fortalecer nuestro sistema inmunológico. Además, dormir bien reduce el riesgo de padecer enfermedades crónicas como la diabetes, la obesidad y las enfermedades cardiovasculares. Por todas estas razones, es importante prestar atención a nuestro sueño y asegurarnos de dormir lo suficiente cada noche.
¿Cuántas horas hay que dormir?
No existe una única respuesta a la pregunta cuántas horas hay que dormir. Como ya te adelantábamos, las necesidades de sueño varían de una persona a otra y dependen de factores como la edad, el estilo de vida y la salud general.
Horas de sueño recomendadas según la edad
La edad es el factor que más interviene en la duración del sueño. Los niños y las personas mayores no comparten, en absoluto, el rango de horas necesarias para un descanso adecuado, te lo explicamos:
Niños y adolescentes: más horas de sueño
Los niños y adolescentes necesitan más horas de sueño que los adultos para apoyar su rápido desarrollo físico y cognitivo. Según la National Sleep Foundation, los recién nacidos (0-3 meses) necesitan entre 14 y 17 horas de sueño al día, mientras que los bebés (4-11 meses) necesitan entre 12 y 15 horas. Los niños en edad preescolar (1-2 años) necesitan entre 11 y 14 horas de sueño, mientras que los niños en edad escolar (6-13 años) necesitan entre 9 y 11 horas. Los adolescentes (14-17 años) necesitan entre 8 y 10 horas de sueño cada noche.
La importancia del sueño para el desarrollo
El sueño es fundamental para el desarrollo físico y cognitivo de los niños y adolescentes. Durante el sueño, el cuerpo libera hormonas del crecimiento que ayudan a desarrollar músculos, huesos y otros tejidos. Además, el sueño mejora la memoria y el aprendizaje, lo que es esencial para el rendimiento académico.
Los niños y adolescentes que no duermen lo suficiente pueden tener problemas de atención, comportamiento y aprendizaje.
Adultos: entre 7 y 9 horas de sueño
La mayoría de los adultos necesitan entre 7 y 9 horas de sueño cada noche para sentirse despejados y vitales durante el día. Sin embargo, algunas personas pueden necesitar más o menos horas de sueño para sentirse bien. Es importante escuchar a tu cuerpo y dormir lo suficiente para sentirte descansado y alerta.
El sueño y la salud física y mental
El sueño es fundamental para la salud física y mental de los adultos. Mientras dormimos, el cuerpo repara y regenera tejidos, fortalece el sistema inmunológico y regula las hormonas. Además, el sueño mejora la memoria, la concentración y el estado de ánimo.
Los adultos que no duermen lo suficiente tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
Personas mayores: menos horas de sueño profundo
A medida que envejecemos, nuestros patrones de sueño cambian. Las personas mayores suelen tener más dificultades para conciliar el sueño y permanecer dormidas durante toda la noche. También pueden experimentar una disminución en las horas de sueño profundo. Aunque las necesidades de sueño varían de una persona a otra, la mayoría de las personas mayores necesitan entre 7 y 8 horas de sueño cada noche.
Grupo de edad | Horas de sueño recomendadas |
---|---|
Recién nacidos (0-3 meses) | 14-17 horas |
Bebés (4-11 meses) | 12-15 horas |
Niños en edad preescolar (1-2 años) | 11-14 horas |
Niños en edad escolar (6-13 años) | 9-11 horas |
Adolescentes (14-17 años) | 8-10 horas |
Adultos | 7-9 horas |
Ancianos | 7-8 horas |
Consejos para dormir mejor
Si visto todo esto, has detectado que no duermes lo suficiente o simplemente deseas mejorar tu calidad del sueño, como expertos en el descanso, desde VitalCama te dejamos consejos muy sencillos y útiles:
- Crea un ambiente adecuado para el sueño: Asegúrate de que tu habitación sea tranquila, oscura y fresca. Usa cortinas opacas, tapones para los oídos o una máquina de ruido blanco si es necesario.
- Temperatura, luz y ruido: factores clave: Controla la temperatura de tu habitación para que sea agradable para dormir. Reduce la exposición a la luz brillante antes de acostarte y minimiza el ruido externo que pueda interrumpir tu sueño.
- Establece una rutina de sueño regular: Intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto ayuda a regular tu reloj interno y establecer un ritmo circadiano saludable.
- Practica rituales de relajación: Incorpora actividades relajantes antes de acostarte, como tomar un baño caliente, leer un libro o practicar técnicas de respiración y meditación. Estos rituales pueden ayudar a preparar tu mente y cuerpo para una noche de sueño reparador.
- Limita la exposición a dispositivos electrónicos: Evita el uso de dispositivos electrónicos, como teléfonos móviles, tabletas o computadoras, antes de acostarte. La luz azul emitida por estas pantallas puede alterar tu ritmo de sueño y dificultar conciliar el sueño.
- Evita comidas pesadas y estimulantes antes de dormir: Limita la ingesta de alimentos pesados, ricos en grasas y comidas picantes antes de acostarte, ya que pueden causar malestar estomacal y dificultar el sueño. También es recomendable evitar la cafeína y otros estimulantes varias horas antes de ir a la cama.
- Realiza actividad física regular: Mantener una rutina de ejercicio regular puede ayudar a mejorar la calidad del sueño. Sin embargo, evita hacer ejercicio intenso justo antes de acostarte, ya que puede tener un efecto estimulante.
- Tener un buen colchón: El colchón que elijas será clave en la calidad de tu sueño. Asegúrate de contar con un colchón adecuado a tus necesidades y preferencias de confort. Un colchón de calidad y adecuado para tu cuerpo puede proporcionar un mejor soporte, aliviar los puntos de presión y mejorar la calidad de tu descanso.